Podemos ha denunciado hoy el proceso de gentrificación que está sufriendo el medio rural cántabro a causa del turismo, y ha pedido medidas urgentes al Gobierno autonómico para evitar que en los pueblos “solo puedan alquilar viviendas los turistas”.

La formación afirma que la apuesta del ejecutivo por el turismo como motor económico de Cantabria, está provocando que se rescindan contratos de alquiler anuales para sacar las viviendas al mercado como alquiler de temporada. Esta tendencia, que se venía observando en los últimos años en los municipios costeros, se ha visto incrementada por el interés que despiertan los alojamientos rurales del interior tras la pandemia.

Podemos considera que la situación actual del mercado de alquiler en el interior de Cantabria “está acelerando la despoblación”, ya que “la llegada de turistas está echando de sus casas a las familias, por lo que son necesarias medidas urgentes”. La formación morada considera que la solución no pasa “por liberalizar el suelo para que se construyan más segundas residencias, sino en que las viviendas existentes salgan al mercado con precios razonables que pueda pagar la clase trabajadora”.

Pablo Gómez, responsable de Medio Rural de Podemos Cantabria, pide contundencia a Miguel Ángel Revilla: “Hacen falta políticas que atraigan a los jóvenes a los pueblos, pero no para que vengan solo en agosto”. Según Gómez, “muchos propietarios se están negando a renovar contratos de alquiler para, posteriormente, alquilar esas casas como viviendas vacacionales multiplicando su precio por cinco, lo que provoca que la oferta de viviendas para alquiler fijo sea casi nula, lo cual está expulsando a las familias de sus pueblos”.

Gómez subraya que “el 70% de las viviendas vacías están en el medio rural, lo que hace necesario adoptar medidas imaginativas para sacarlas al mercado y desinflar la burbuja que se está creando”. Recrimina que “sobre la mesa de Revilla está nuestra propuesta de crear una Oficina de Vivienda Rural; no podemos tener pueblos con más del 40% de sus casas vacías en donde, al mismo tiempo, es casi imposible alquilar una vivienda”.